¿En qué momento se sabe que estás rayando la locura? Hasta ahora lo de vivir sola ha provocado que hable con gente difunta, muy cercana a mí, y no tanto (una época me dio por hablar con el antiguo propietario de mi piso, que había fallecido hacía un tiempo, y al que no conocía, mi querido sr. Evaristo). Evidentemente, sé que es una excusa para elucubrar mis ideas, y lo tenía bastante controlado. Una vez que empecé a tener gatos, eso ya estaba superado, porque si le hablas a un ser animado, parece que esté socialmente más aceptado. A la pobre le meto unas chapas increíbles y ella pasa de mí de forma muy elegante.
Estaría bien! ;)
ResponEliminaDicen que hay que hablarles a las plantas. Un beso
ResponEliminaBueno, más allá de que no son movientes, las plantas son seres vivos, por lo que unas palabras dulces no son malvenidas.
ResponEliminaLos gatos son seres elevados, y eligen no escuchar lo que no les interesa.
Con los difuntos, bueno, el problema supongo que se plantearía cuando el monólogo se transforma en diálogo, cuando las preguntas dichas al aire, tienen respuesta con sentido.
Mi diagnóstico es que estás muy cuerda, hay locos más locos y más peligrosos.
tengo un familiar que conduce un camión, todo el santo día de arriba abajo, durmiendo en la cabina y en completa soledad. Hace años se hizo un tatuaje hiperrealista de su abuelo, y va hablando con él en los viajes... A mi me pareció lo más normal del mundo.. Pide cita para todos ;)
ResponEliminaNo está mal hablarle a las plantas.
ResponEliminaSi se las escucha responder, ya se está al borde de ser como Poison Ivy, una enemiga de Batman.
Un abrazo.
Hablar con las plantas dicen que le hace bien a las plantas. Yo le meto chapas a los aguacateros.
ResponElimina