Pues bien, ahí va: estoy harta de sentir que vivo en una España de charanga y pandereta; de no estar de acuerdo con las políticas actuales; de que unos pocos tengan mucho y encima no repartan, incluidos futbolistas (¿es que no les da vergüenza ganar tanto dinero? tendría que estar prohibido); de pedir perdón por tener trabajo y encima no poder quejarme, cuando estoy en mi derecho. Me fastidia sobremanera que el periodismo se haya convertido en un método de manipulación; que la gente calle y que encima nos hagan creer que, si no eres mangante y mentiroso, eres tonto, cuando en realidad, es como debería ser.
Un gran ejemplo de cómo triunfar en este país. Ni siquiera sirve para payasa, aunque lo parezca.
Este día es fantástico, casi catártico. Ha sido un desahogo en toda regla, aunque reconozco que me he dejado muchas cosas en el tintero (¡o en el teclado!).
Lo siento, no puedo comentar más. Me tengo que preparar el disfraz de Belén Esteban , voy a estar imponente. Digo yo.
ResponEliminaAbrazos
a mí el carnaval no me disgusta del todo porque se ve a chavalines disfrazados por la calle y resulta simpático, crea un ambiente alegre.
ResponEliminaen cuanto al éxito de belén esteban, es un misterio comparable al del triángulo de las bermudas. si por lo menos fuera atractiva... pero es lo más antierótico que hay!
Jajajaja ha quedado todo dichoy bien dicho!
ResponEliminaMoagssff