No me viene el roncador y me cuenta que va a triunfar algo que se llama cosas de Internet o algo parecido, porque seguro que no era tan básico. A ver, resumiendo, aplicar Internet a un montón de objetos y artilugios.
A mí me parece de ciencia ficción, pero teniendo en cuenta que cuando nací no existían los ordenadores o más bien escaseaban en mi círculo social (igual algún ricachón de la Costa Oeste tenía algo parecido, no sé). En realidad, me gusta la idea de que una persona ciega pueda ver a través de unas gafas especiales o que se pueda controlar los latidos del corazón de un recién nacido con la ropa.
Me ha dicho que incluso se podría poner en los pañales y analizaría la caca del bebé, ya sé que es algo morboso y escatológico, pero mira, así estaríamos seguros de que están sanos y prever cualquier infección rápidamente. Incluso, para los muy celosos se me ocurren mil ideas... tal vez es algo intrusivo, en el fondo.
jajaja reconosco que es un poco alocada la ciencia ficción y lo que vendrá ses y lo que vendrá ses
ResponEliminaJajaja A ver si le ponen algo a mi plancha (internet o lo que sea) para que funcione sola :)
ResponEliminaBESOS!
Cuando se juntan la ciencia y la tecnología salen cosas realmente espectaculares; lo malo es que siempre hay alguien que quiere sacarle más provecho de lo habitual y al final acaba jodiendo las cosas :P
ResponEliminaBss
*Tunneando Blogger
Con esos pañales nos evitaríamos las conversaciones de las madres a propósito de las cacas de los bebés!! No está mal pensado ja ja...
ResponEliminaJajajaja para mi proximo hijo ( si me atrevo :-) ) me pido un analizador de cacas jajaja
ResponEliminaQue pases buen fin de semana.
ResponEliminaY sólo de pensar que realmente hay un montón de cosas que ya están inventadas pero no nos las venden porque tienen que dar salida primero a lo que hay, se me ponen los pelos como escarpias. Jajaja. Un besote!!!
ResponEliminaPues yo estoy deseándo conocer todas esas cosas...
ResponEliminaLo de ver los ciegos no lo tengo yo tan claro. Es más, de todo eso no me queda claro nada. Que la ropa de un bebé analice sus latidos sería poner constantemente en el cuerpo de un niño un aparato electrónico que no me queda a mí claro que no le vaya a afectar. No sé, a veces demasiado progreso me parece demasiado. Biquiños!
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