Aluminízate

A día 1 y ya estoy con la mitad del sueldo. Han pasado a saludar el recibo de la luz y del gas y me he quedado tiritando, a este paso voy a tener que montar algo gordo, aunque no se me ocurre ninguna idea clara. Se aceptan sugerencias.

De todos modos, no ha sido por malgastar, ya me han puesto las ventanas nuevas. Es una gozada. Manuel, el aluminista (persona que hace instalaciones de aluminio y gana mucho dinero con ello), se ha convertido en mi salvador, al que venero y adoro como si fuera un dios, incluso he pensado en ponerle un pequeño altar, con cirios y todo. Lo de las velas, más que nada, para cuando a mediados de mes decida que se acabó lo de encender la luz, para no gastar.

Qué Papa ni leches, que pasen de la fumata bianca e instauren al Manuel como nuevo dueño y señor de la religión. El tío, hará poco más de metro y medio, tremendamente inquieto. Y, paradójicamente, me puso tan altos los tiradores que me miró con una sonrisa y me dijo: menos mal que tú llegas, porque si fuera por mí, no abríamos nunca la ventana. ¡Pues para qué los pones a esa altura, alma de cántaro!