En mi jardín se ha rebelado una paradoja... intento matar las hormigas con el spray que me vendió el señor de la droguería, pero resulta que no puedo echárselo a las plantas (sin que se mueran, claro), y ahora resulta que han poblado el geranio que ha sobrevivido a mis desprecios, abusos de agua y desesperación, durante dos largos años. Ahora tendré que comprar spray para matar hormigas en las plantas (claro, un producto distinto para cada cosa).
En resumen, o me cargo la planta y las hormigas o vivimos todos felices y hacemos un fiestón cada noche en la terraza juntos. El caso es que desde que leí el libro ese del karma que les tengo cierto cariño a las hormigas (siempre y cuando respeten mi espacio y no entren en casa).
Pues los insectos ya podrían ser más territoriales, encima son unos hippies que conviven en armonía entre ellos, termitas y hormigas son felices juntas, ¡maldita naturaleza!
Desde que escribieron un Best seller, sobre ellas (La cigarra y la hormiga), no hay quien las aguanten..
ResponEliminamanolo
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Yo a las abuelas las veía poner un tarrito con miel para atraparlas. En lo que van a la miel, no van a la planta.
ResponEliminaBesos!
Este año hay un monton es tremendo!!besos
ResponEliminaSi, hay muchísimas!
ResponEliminaBesos
De vez en cuando también tengo algunas en el balcón que corretean por las macetas, pero la verdad es que nos llevamos bien: ellas respetan mi espacio en casa, y yo respeto su espacio exterior. Mi vena psychokiller con insultos incluídos sólo la saco con mosquitos y, sobretodo, con las malditas cucarachas que odio con todas mis fuerzas (cruzo los dedos, pero lo cierto es que en los últimos años parecen haber captado el mensaje de malvenida que les dejo siempre que viene alguna de visita...)
ResponEliminaTotal que por por ahorrar dos con setenta que cuesta un saco de cincuenta litros de sustrato vegetal, mantillo no que las quema, sustrato, mantienes de balde a la reina de las hormigas y a toda su corte, sacaría al pobre geranio de la maceta, le pondría en un cubo con las raices metidas en el agua, tiraría la tierra actual, con nido incorporado y al día siguiente replantaría el geranio en una más amplia, de cerámica. ¡Si es que no te has gastado ya todo el presupuesto en aire acondicionado! Sí no quieres tirar la tierra, la puedes meter en una bolsa de plástico bien cerrada y darle gas, del Lidl, con eficacia comprobada, hasta que se mueran todas, pero creo que ese sería un crimen innecesario. Mejor expulsarlas de casa. No? Un beso.
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