El roncador está un poco sordo, aunque me parece poco, diría que tiene sordera selectiva y transgresora. Me explico, o bien no te oye o bien entiende lo más curioso del mundo. El otro día estaba algo apagadilla y, como él venía de lo más estimulado, o sea, que no callaba ni se estaba quieto, le pareció que yo debía de estar muy enfadada o algo peor.
A veces pienso que el silencio está poco valorado, hay momentos en los que me gustaría sentir que estoy a solas con mis pensamientos. Y así me sentía, en este estado de desasosiego, cuando me preguntó qué me pasaba. Ni siquiera recuerdo qué contesté, probablemente algo como nada, estoy bien, sin energía. Él entendió nítidamente: "estoy tenue", vamos, lo mismo.
En cierto modo, suele comprender mucho mejor lo que le digo porque no me oye. Sé que es una contradicción, pero nunca habría expresado mejor mi estado anímico: tenue.
El silencio entendido está poco valorado, y sobre todo el silencio se practica muy poco. Abrazos y mutis por el foro
ResponEliminaMe gusta el silencio, cuando me gusta, ¿me entiendes?
ResponEliminaTotalmente, lo has dicho muy claro.
Eliminayo hablo poco aunque por escrito me desenvuelva más o menos bien. en cualquier quedada, puedes apostar que soy el que menos habla de todos. prefiero escuchar...
ResponEliminaJeje, desvaída...
ResponEliminaCoincido con Chema, me pasa exactamente lo mismo, y la mayoría del tiempo prefiero el silencio a mi alrededor, me da paz.
Besos
Ohhh, qué de agradecer, con lo que me gusta un buen silencio a tiempo.
ResponEliminaCuando estoy tenue, adoro los silencios y la soledad. Incluso un buen silencio estando acompañado por alguien que sabe compartir esos silencios
ResponEliminaYo soy de muchos silencios..y sobretodo cuando me estoy autorrecuperando...son necesarios
ResponEliminaMoaaagggsssff