To rain, or not to rain

Estoy como el tiempo, que ora exploto y desato la tormenta, ora sale el sol y con ello sale el arcoíris. Me da a mí que he equivocado la región terrestre en la que vivir, porque soy más de tiempo estable, o frío o calor.

Y ahora estaréis pensando, ¿qué le ha dado a esta por hablar del tiempo? pues mira, que a veces hablar de banalidades también le anima a una el ánimo que, con tanta lluvia, ya no sé cómo hacer por no hacer aguas.

Si es que cómo no voy a hablar de esto, que llevo una semana con la alfombra mojada en casa porque me da miedo meterla en la secadora y no ha salido un rayo de sol desde hace días... bueno y, si ha salido, me da pánico que arranque a llover, que le cuesta poco. Me paso el día mirando el cielo. Total, que en eso estaba, en que por fin lucía el sol, que pongo una lavadora de ropa delicada y ha sido como ver a Zeus atravesando el cielo en forma de rayo, trueno y aguas mil (y eso que no estamos en abril). ¡¿De qué voy a hablar?!