diumenge, 5 de setembre del 2021

Atenea

Primera semana de trabajo, ¿puede ser que en tres días necesite ya vacaciones? Encima, llega el domingo y mi mente se despierta a las 7 de la mañana, tengo los ojos de lechuza, que vendría a ser el epíteto de Atenea en la Ilíada (toda la vida pensando que era por su sabiduría y resulta que es porque no podía dormir custodiando el Partenón). Y digo yo, que si fuera porque estoy ideando la salvación de la humanidad, pero a lo sumo me da por programar las clases, que ya es.

Además, entre los que cantan y gritan por la calle, y un vecino que le da por hablar por teléfono en su balcón, a altas horas de la noche... estoy por comprarme una escopeta de balines, y practicar el tiro al gilipollas. Lo cierto es que pensaréis que no lo hago por lo de por la boca muere el pez, pues no, es que tengo mala puntería, definitivamente, acabaría rompiendo una de mis ventanas.

12 comentaris:

  1. No eres la única que llega al trabajo y ya está echando en falta las vacaciones. Pero tranquila...que todo pasa. Un abrazo

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  2. a mí cualquier ruido me despierta, sería incapaz de dormir en una habitación que diera a la calle...

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  3. Esa sensación de llegar toda descansada y a los tres días haber acumulado todo el estrés que tenías en Junio...me resulta levemente familiar...o no tan levemente.
    Besitos.

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  4. ¿Con solo tres días de trabajo?... Caray

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  5. Necesitamos vacaciones paraa recuperarnos de las vacaciones, ¿Tan difícil es de que nos entiendan?

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  6. que me he acordado de cuando el vecino compro carro, y no manejaba bien la alarma y le sonaba cada nada en la noche... y ese deseo de agarrar un bate y darle al carro con todo... !! jajaja me identifico con el tiro al gilipollas !!

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  7. da igual los días que me den de vacaciones, a los tres días de volver ya estoy odiando a todo el mundo por igual :)

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  8. Es que a veces la vuelta al trabajo es un jaro de agua fría.
    Nosotros somos lechuzas, dormimos muy poco, y sé que está mal. Pero somos así, paseos perrunos hasta las doce de la noche, llegada a casa...y a las siete estamos en pie. Y si estamos en casa es igual, nos dormimos tarde y madrugamos, invierno y verano. Siempre fui de dormir poco, ya no voy a cambiar. Eso sí, nop chillo, ni hablo a voces, el descanso aeno se respeta.
    Muy feliz día.

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  9. Nosotros tenemos casi debajo de casa unas máquinas de vending donde poder comprar café, refrescos, tabaco, hamburguesas, condones... así que te puedes imaginar lo animadas que son las noches en verano, que se duerme con las ventanas abiertas y se escucha todo lo que pasa en la calle.

    Besos.

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  10. ¿Por qué hay gente tan dinámica, tan dispuesta a hacer algo desde temprano? Y además en forma nada sigilosa.

    Me llamó la atención el título de la entrada.
    Tal vez le hayas encontrado una explicación para el epíteto de Atenea. Tal vez no la dejaban dormir.

    Besos.

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