Estaba leyendo un tweet en el que había una imagen de un nido con tres pequeños gorriones y un lindo gatito.
Fuente: https://twitter.com/jm_clavero/status/1558534315486625794En los comentarios muchos se habían encargado de desmentirlo, de afirmar con toda rotundidad que eso era imposible, y a mí me había hecho ilusión pensar que era cierto, así que he decidido creer, prefiero pensar en la belleza de esa extraña convivencia, en el altruismo de esa ave, antes que sentirme orgullosa por ser capaz de descubrir, antes que nadie, que eso es imposible. Sobre todo, porque me encantan los imposibles; y a mucha otra gente, de lo contrario, Walt Disney no seguiría triunfando (y eso que pensaba que una no era muy de moñadas).