El test

Siempre he pensado que no se puede evaluar absolutamente nada con un test, pero ahí estoy, a mi edad, examinándome de mis primeras asignaturas y todo son tests, en los que bajan puntos por equivocarte y eso me estresa. La clave está en no repasar, porque ahí ya la lío, la primera opción es la correcta y, si no es así, para ello está septiembre (creo, porque voy un poco perdida con todo esto).

Lo peor son las preguntas trampa, esas en las que hay más de un negativo y a mí me enseñaron que dos noes juntos hacen una afirmativa, como en matemáticas (qué me habrá dado esta semana por los números).

Hay un momento crucial en todo examen en el que estás leyendo y te preguntas en qué tema salía esa pregunta, porque todo se convierte en un galimatías y no entiendes nada. Por fortuna, tengo una teoría, ante la duda, es mejor contestar, total, de perdidos al río. El azar es tu gran compañero y el roncador siempre dice que ponga C de correcto o B de bien... espero que los profesores sepan eso, de otro modo lo llevo muy crudo.